¿DONDE VAMOS?

PALABRAS:
¿DONDE VAMOS? - Cristian Lagiglia

MÙSICA:
And now (nobody waits) - Hernan Pesce
Letra: Nico Barboza




¿DONDE VAMOS?

¿A dónde vamos?

¡Qué buena pregunta! Además de ser una buena pregunta, es casi una recurrencia.

He llegado a la insana conclusión que solo hay dos motivos por los cuales la raza humana llega a hacerse esta cabal pregunta.

El primero de los motivos es para alardear.

Alardear, con esa frase entre signos de interrogación, de que uno ya tiene un plan de antemano por el cual cursar.

El que escucha a otro hacer esta pregunta retórica a los cuatro vientos y como oteando el horizonte, viendo el devenir con la claridad y la suficiencia del que hace unas tostadas con manteca, se queda atónito ante tanta iluminación.

Automáticamente, a quien escucha esta aseveración lo aquejan dos males incurables.

La ignorancia y la envidia.

La ignorancia, porque, en realidad, no tiene ni puta idea donde va y la envidia, porque no se le ocurrió a él semejante genialidad de preguntarse cuál es el camino a seguir, sabiendo cuál es el camino a seguir, ignorando que el iluminado que se hace esta pregunta, en el noventa por ciento de los casos, lo alumbra un foquito de 25 watts y lo hace solo de hijo e’ puta que es, para instaurar en el otro el pecado capital de la envidia.

La otra razón por la cual nos hacemos esta pregunta, es quizás la más veraz y sincera.

Porque no tenemos ni la menor idea donde estamos parados y pensamos que, por lo menos, haciendo esta pregunta encontraremos el motor necesario para que nos movilice hacia otro valle mejor, sin sospechar que va a ser la misma mierda que el anterior nada más que vamos a estar más cansados.

Ya lo decía la publicidad de Arauca “quedate donde estás, gil”.

Me enrolo e identifico más con este grupo de ignorantes que con los que ya tienen todo clarito y la ropa planchadita para disfrutar de un futuro cegador, de tan brillante.

Esta gente, en su gran mayoría impostora, como ya convenimos, es la que me hace desconfiar de que doblando por Maipú para abajo, me esté esperando un futuro provechoso.

Esta gente que tiene la bola de cristal, los cordones siempre bien atados y tienen el pelito siempre bien peinado cuando la vida se pone a sacar las fotos para el cuadro del empleado del mes, es la gente que más me llena de certezas.

Ergo, si agarrás para la derecha, yo agarro para la izquierda.

Es la tropa que dice muy suelta de cuerpo: ...”a mí, leer a Bucay me hizo entender el propósito de mi existencia”...

Les tengo una mala noticia, Bucay no sabe ni donde tiene el culo y mucho menos donde va a parar tu condenada y burguesa existencia.

Y de ser cierto esto que proclaman estos esperpentos, lo de ya saber cuál es el propósito de su existencia, ¿qué les queda?

¿Enterarse donde está el esternocleidomastoideo?, ¿dónde puta tiene parada el 61 en el Bombal?, por citar dos cuestiones al azar que guardan un gran misterio para mí.

Creo que todo radica en la eterna búsqueda y es ésa búsqueda y no el hallazgo, lo que nos hace seguir latiendo como si fuéramos a sacar a bailar a la más linda del grado en la fiestita de fin de año de la escuela.

De todas maneras, cualquiera de las dos razones son válidas porque en ellas se esconden, bajo frondosos tapiales, la impostura y el hartazgo.

Nos topamos a menudo, casi periódicamente, en nuestra vida ordinaria, con esta clase de preguntas.

Así, sin más, vamos a ver que nuestros políticos se preguntan a sí mismos, para dónde va el rumbo del país, con ellos adentro, por supuesto, y tratando por todos los medios de encontrar la mejor ubicación.

Tendrán más suerte que otros a los que el tachero le pregunta: ¿A dónde vamos?

Recurrente es esta pregunta entre los pibes de la esquina que, ya cansados de atorrantear en la misma intersección todas las benditas siestas, van buscando otros horizontes donde no haya una vieja que los chiste desde atrás de la ventana para que cesen en su costumbre de decir tantas barbaridades y larguen el porrón y se busquen un laburo, ¡carajo!

En una maldición se convierte esta interrogación cuando, un domingo a la tarde, con las patas estiradas en un sillón y con el chopp de cerveza chorreando de lascivia al alcance de los dedos de la mano, justo cuando pasan el último partido de la fecha, la señora esposa le pregunta al proyecto de Homero Simpson:...¿y, viejo? ¿a dónde vamos?...

Muchas veces, ante la angustia de no poder tolerar el cadalso de nuestra mísera existencia, nos preguntamos a donde van otros.

Por ejemplo:

¿A dónde van a parar las cañitas voladoras?, ¿a dónde van a parar los mejores besos que dimos?, ¿a dónde va la gente cuando llueve? se preguntaba el poeta, ¿a dónde van las hormigas coloradas que tengo en la habitación?, porque de donde vienen, ya sé, ¿a dónde van a parar los mejores años de nuestras vidas?, ¿a dónde va la guita que acabo de cobrar? que ya no me queda un mango y recién es día cuatro, ¿a dónde va tan apurado el turro al que le acabo de hacer dedo e hizo como que no me vio?, ¿a dónde van a parar las geniales ideas que hemos tenido rascándonos el higo una tarde de otoño?, ¿a dónde va el mozo cuando le hacemos seña para que venga de una vez por todas?, ¿a dónde va a parar la cintura de nuestra mujer y dónde fue a parar el amante latino que supimos ser durante los primeros quince minutos de nuestro matrimonio?

Todas preguntas sin respuestas aparentes y que guardan un enigma místico en su interior.

Y ya, en tren de ponerme filosófico y meramente aburrido, creo imperturbablemente más en las preguntas que en las respuestas, porque las primeras están barnizadas con la pátina de la inocencia y las segundas con la chatura del que ya se lo sabe todo.

Todo este despropósito de conceptos tirados a la marchanta y sin sustentos, vertidos sin ningún tipo de estilo más arriba y la repetición de los goles que se comió la Lepra en Córdoba sirvieron de excusa perfecta para no ir a lavar el baño.

Al final sabía, hace como dos horas, a donde iba yo, lo que me deparaba el futuro.

Lo que pasa es que cuando el futuro me llama, yo a veces, me hago el boludo.

12 comentarios:

pam dijo...

genial, me reí mucho, yo a veces salí empleada del mes!!!

sebastian dijo...

malisimo, sin sustento, una vosta

CRISTIÁN LAGIGLIA dijo...

se agradece y acepta el comment...de todas maneras si te tomaste la molestia de leerlo te habrás enterado que hasta el autor avisó que era sin sustento...y el que avisa no traiciona...mucho mejor que leer esto te comverdría leer un Larousse( yo tengo dos, te paso uno), porque bosta va con B alta y malísimo y hasta tu nombre...llevan acento...

CRISTIÁN LAGIGLIA dijo...

FE DE ERRATAS: ... convendría...va con N y no con M antes de V...maldita dislexia y maldito teclado...

laura dijo...

inprecionante los 2 como ciempre negro ya te dige lo ke pienso, verni, ese tema es alusinante , ermosisimo............ a tanvien kiero desirles que me kiero ganar el larúuuuuuuusss pero con trduxion al ingle, me darias el otro negro?? besotes a los dos

carla dijo...

ladran sancho, creo que te puede gustar o no, pero de ahi a tratar una manifestacion de arte de bosta ,me parece que habla a las claras de quien lo escribio. Aguante ojosdepez

Unknown dijo...

Me gustó especialmente éste que ha tenido la noble función de alejar al hombre de la triste tarea higiénico-escatológica. ¡Así vale la pena escribir! ¡Y a ver qué admiradora del texto le va a dar una mano al negro así no pierde el tiempo enrrollando el papel, carajo!

caro dijo...

No me gusta ni ahí hacer la limpieza, pero me ofrezco de buena gana si a la noche me contas un cuentito para ir a dormir. Excelente prosa, excelente canción, parece que sigue un excelente año. Pensalo, lo digo en serio lo de ser mucama cama adentro.

Marie dijo...

no deja de sorprenderme lo bueno que está esto. A veces me rio, a veces me dan ganas de llorar, a veces me dan ganas de ir abrazarte y otras me dan ganas de matarte. Lo mejor de todo es que me dan ganas con alguien que ni conozco. Gracias por todos los lunes, y no hay que darle bola a la gilada, como dicen más arriba...hablan sancho...

Anónimo dijo...

Pelado, estoy en Carlos Paz con Cintia, dándonos un pequeño lujo por estos días llamado vacaciones, y le estoy mostrando a ella tu blog. Nos gustó mucho a los dos. La verdad, es que no me dejan de sorprender gratamente tus publicaciones. Ella te manda un beso, y yo un fuerte abrazo. Sergio Marún.

SILVY... dijo...

PELYTA,esto de que escribas me encanta por muchas razones,mas alla de que te aplaudo por cada cosa que haces,vos sabes lo mucho que te admiro y lo que te recontra quiero,pero...decime..CUANDO LE VAS A DAR BOLA A ESAS SEÑORITAS QUE EN CUALQUIER MOMENTO TE OFRECEN CASA,COMIDA Y....PENSALO,PERO...NADA DE MATRIMONIO.TQM

Mariano R dijo...

Pela muy bueno, y despues leo la respuesta que le escribis a Sebastian y me vuelvo a cagar de risa ja ja